Cientos de estudiantes extranjeros que participaban del programa de verano de intercambio cultural del Departamento de Estado renunciaron a sus puestos de trabajo en una fábrica de chocolate de Pennsylvania. Los estudiantes afirman que sus empleos son en condiciones de explotación y en muchos casos no alcanzan a cubrir los costos de las visas que debieron abonar en sus países de origen. Según se informó, se exigió a los estudiantes levantar pesadas cajas, trabajar turnos de ocho horas que comenzaban a las once de la noche y permanecer parados por largos períodos mientras empacaban golosinas Reese, Kit-Kat y Almond Joy en una línea de producción de rápida velocidad.
Estudiantes extranjeros de programa de intercambio renuncian a puestos de trabajo estadounidenses en medio de reclamos por explotación laboral
Titular19 Ago. 2011