Los candidatos republicanos se reunieron en Charleston, Carolina del Sur, el jueves por la noche, para mantener el último debate antes de las primarias del sábado. El debate coronó un ocupado día en el que trascendieron la salida de la carrera electoral del gobernador de Texas Rick Perry, el triunfo de Rick Santorum sobre Mitt Romney en el recuento del caucus de Iowa y nuevos detalles de las infidelidades de Newt Gingrich durante su segundo matrimonio. En sus comentarios, Gingrich, Romney y Santorum promocionaron sus credenciales de derecha y apuntaron al Presidente Barack Obama.
Gingrich afirmó: “Es imperioso que derrotemos a Barack Obama. Es, según creo, el presidente más peligroso de nuestro tiempo, y si es reelecto luego del desastre que ha sido, el nivel de radicalismo de su segundo mandato será realmente dantesco”.
Romney afirmó: “Nuestro Presidente ha dicho, creo que de manera muy reveladora, que quiere realizar una transformación fundamental de Estados Unidos. Está equivocado. Debemos restablecer los valores que hicieron de este país la esperanza de nuestro planeta”.
Rick Santorum afirmó: “Elijan a alguien que pueda ganar en los estados en los que tenemos que ganar y que marque un claro contraste con el Presidente Obama. Carolina del Sur, en el pasado les dijeron que deben conformarse con un moderado porque es el que puede ganar. Y la última vez que tuvimos una situación como esta en 1980, ustedes dijeron 'no, vamos a optar por una fuerte convicción conservadora'”.