El ejército sirio continúa lanzando ataques contra la localidad fronteriza de Ras al-Ain, razón por la cual centenares de civiles están huyendo a la vecina Turquía. Los nuevos bombardeos se producen días después de que más de 11.000 civiles sirios se vieran obligados a escapar durante los ataques de la última semana, en una de las mayores huidas de refugiados del conflicto sirio a la fecha. En Ginebra, el jefe de Gestión de Desastres y Crisis del Movimiento Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja advirtió de que Turquía necesita asistencia considerable para lidiar con el creciente número de refugiados sirios.
Simon Eccleshall dijo: “Desde julio de 2012, se ha duplicado la población de los campos. Y pienso que tal como lo hemos visto en los últimos días, ha habido un aumento en la cantidad de sirios que se van a Turquía. Ahora están viendo que la situación se está prolongando; las ideas iniciales de que la población iba a permanecer desplazada por un tiempo más breve se están reevaluando, y el gobierno de Turquía, junto con sus aliados, está haciendo planificaciones para un programa de asistencia a más largo plazo”.