Los rebeldes de la República Democrática del Congo capturaron la mayor ciudad oriental del país, Goma, en su combate contra las tropas gubernamentales. Los grupos de ayuda humanitaria afirman que han suspendido provisoriamente las operaciones en diversas zonas tras la violencia que ha provocado el desplazamiento de miles de personas. En Naciones Unidas, los funcionarios de ayuda advirtieron que el conflicto entre el gobierno de la República Democrática del Congo y los rebeldes del M23 está poniendo en peligro a los civiles.
Jens Laerke, vocero de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU (OCHA), expresó: ”OCHA y la comunidad humanitaria que está trabajando en las provincias de Kivu en el este del Congo están muy preocupadas por el impacto que la intensificación de los combates está teniendo en la protección de los civiles y su desplazamiento. También nos preocupa que sea cada vez más difícil llevar a cabo las operaciones humanitarias”.
Adrian Edwards, vocero del Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU (UNHCR), agregó: “El avance de los rebeldes del M23 ha impulsado a muchas personas a huir hacia Goma y Ruanda, y un gran campo en Kanyaruchinya para personas desplazadas dentro del país se ha vaciado prácticamente. Antes había aproximadamente 60.000 personas ahí”.