El Departamento de Justicia hizo público un acuerdo sobre hipotecas por 25.000 millones de dólares con los cinco mayores bancos del país para resolver las demandas con respecto a ejecuciones y prácticas hipotecarias irregulares que provocaron el endeudamiento de los propietarios y hundieron la economía del país. Se prevé que la mayor parte del acuerdo hipotecario favorezca a un millón de propietarios mediante la disminución de la deuda hipotecaria o la refinanciación a tasas de interés más bajas. Alrededor de 750.000 personas que perdieron sus hogares a causa de las ejecuciones hipotecarias recibirán de 1.500 a 2.000 dólares. El fiscal general Eric Holder ayudó a anunciar el acuerdo el jueves.
Eric Holder declaró: “Hemos visto como muy a menudo los servicios obligaron a los propietarios a ser ejecutados a pesar de que las normas federales exigen que los servicios intenten otras alternativas primero. Estas irregularidades no solo perjudicaron a los prestatarios, que hubieran podido pagar las hipotecas modificadas. Sino que además intensificaron la espiral descendente de nuestra economía y de las comunidades de todo el país. Erosionaron la fe en nuestro sistema financiero y castigaron a los contribuyentes estadounidenses que tuvieron que pagar los platos rotos con ejecuciones hipotecarias que podrían haberse evitado. Este acuerdo nos permite recuperar los valiosos recursos de los contribuyentes”.
Si bien el acuerdo está siendo descrito como un acuerdo de 25.000 millones de dólares, los bancos deben pagar tan solo un total de 5.000 millones en efectivo entre todos.
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