Las Naciones Unidas advierten que hasta 1,5 millones de niños menores de cinco años están al borde de morir de hambre en la zona de Sahel, asolada por la sequía, en África Occidental. En un pedido de ayuda urgente, Margaret Chan, de la Organización Mundial de la Salud, dijo que se acaba el tiempo para impedir la muerte de una enorme cantidad de personas.
Chan afirmó: “Estamos hablando de entre 1 a 1,5 millones de niños menores de cinco años cuyas vidas penden de un hilo. Pero hay un marco de oportunidad. Debemos preguntarnos si podemos transformar este peligro en oportunidad. Y ese marco de oportunidad se cierra día a día”.