El martes, François Hollande fue investido como nuevo Presidente de Francia tras su victoria electoral de este mes. Hollande ganó las elecciones gracias a un sentimiento de anti austeridad y se convirtió en el primer candidato del Partido Socialista en dirigir Francia desde 1995. En su discurso inaugural, prometió abordar los problemas económicos del país.
El Presidente Hollande afirmó: “Incluso hoy estoy evaluando el peso de las obligaciones que enfrenta nuestro país: endeudamiento considerable, crecimiento débil, desempleo elevado, competitividad dañada y una Europa que está luchando por recuperarse de la crisis económica. Pero en este mismo momento declaro que no hay nada predestinado: a partir de ahora, una voluntad colectiva y unánime, una dirección clara y fija”.