El gobernador de Georgia Nathan Deal sancionó una ley que prohíbe la realización de abortos tras las primeras veinte semanas de embarazo, excepto en caso de que la vida de la madre esté en peligro o cuando es poco probable que el feto sobreviva. En una declaración, Deal basó su sanción de la ley en la noción muy disputada de que un feto ya puede sentir dolor a esa altura. Al menos otros seis estados prohíben el aborto a las veinte semanas de gestación basándose en el argumento del sufrimiento fetal, a pesar de que las investigaciones médicas desacreditan esa idea.
Georgia promulga prohibición del aborto a partir de la 20ª semana de embarazo
Titular03 May. 2012