Dirigentes del mayor grupo de monjas católicas de Estados Unidos se reunieron el martes con funcionarios del Vaticano en Roma para tratar las posturas políticas de las monjas, tema que se encuentra en un impasse. El Vaticano despertó la polémica luego de amonestar a la Conferencia de Dirigentes de Religiosas (LCWR, por su sigla en inglés) por promover “temas feministas radicales”, “cuestiones de justicia social” y desafiar las enseñanzas de la Iglesia sobre la homosexualidad y el sacerdocio sólo para los hombres. La hermana Pat Farrell, dirigente del grupo de monjas, dijo el martes que la reunión fue constructiva.
Farrell dijo: “Estamos agradecidas por la oportunidad de un diálogo abierto, y nuestro próximo paso será hablar con nuestras integrantes para decidir cómo actuar a partir de ahora”.
Un periodista preguntó: “¿Cuál fue la atmósfera durante la reunión?”.
Farrell respondió: “Mantuvimos un diálogo abierto”.
El periodista preguntó: “¿Van a tener otra reunión en Roma?”.
Farrell dijo: “Por el momento, vamos a dar este paso específico”.