Los ataques con aviones no tripulados continúan mientras Estados Unidos y Pakistán siguen en desacuerdo por la reapertura de las rutas de suministro de la OTAN para la guerra en Afganistán. El miércoles, el Secretario de Defensa, Leon Panetta, dijo que el cierre mantenido por Pakistán le está costando a Estados Unidos 100 millones de dólares adicionales por mes. Las conversaciones llegaron a un punto muerto en relación con una serie de cuestiones, entre ellas, la negativa de Estados Unidos a pedir perdón por un ataque aéreo en el que murieron 24 soldados paquistaníes el año pasado. En Islamabad, la ministra de Relaciones Exteriores paquistaní, Hina Rabbani Khar, negó las afirmaciones de que lo que impide llegar a un acuerdo es la exigencia de su país de tarifas más altas para las rutas.
Hina Rabbani Khar declaró: “Pakistán no está en este momento en ningún tipo de debate de especulación de precios. Indudablemente, esas impresiones son incorrectas, erróneas y deben ser despejadas lo antes posible. Estados Unidos sabe muy bien cuáles son nuestras necesidades y requerimientos para movernos en esa dirección, para permitirnos tomar esa decisión [de reabrir las rutas]. Por lo que me gustaría que se ajustara a eso”.