La crisis en Siria se ha intensificado luego de la masacre de suníes en la provincia de Hama. Testigos y activistas han declarado que fuerzas apoyadas por el gobierno asesinaron a 86 personas en el pueblo de Qubair y que aproximadamente la mitad de ellas eran mujeres y niños. La mayoría de las víctimas fueron quemadas en sus propios hogares y muchos de los cuerpos muestran señales de mutilación. Según informes, la masacre fue perpetrada después de que decenas de soldados sirios y miembros de la milicia rodearon el pueblo desde todas partes. Este jueves, los soldados sirios bloquearon el acceso al pueblo a los funcionarios de la ONU y algunos observadores fueron amenazados con tiros cuando intentaron acercarse. El ataque de Hama se produce menos de dos semanas después de que fuerzas a favor del gobierno mataran a más de cien civiles en el pueblo de Houla. El gobierno Sirio ha rechazado cualquier responsabilidad por ambas atrocidades y ha culpado a los “terroristas” rebeldes.
Soldados sirios bloquean el acceso a lugar de masacre a funcionarios de la ONU
Titular08 Jun. 2012