El templo sij de Oak Creek, Wisconsin, reabrió sus puertas por primera vez desde el tiroteo que mató a seis fieles. Se prevé que miles de personas asistirán hoy a una secundaria local para realizar una ceremonia pública en honor a las víctimas. El reverendo y activista por los derechos civiles Jesse Jackson fue una de las personalidades que visitó Oak Creek el jueves para expresar su apoyo.
Jesse Jackson declaró: “No queremos que la comunidad sij se sienta asilada. Somos parte de la misma familia. Lo que podemos hacer en este momento es compartir con ustedes muchas de nuestras preocupaciones por haber sido parte de esto. No debemos limitarnos, sino que debemos trabajar más unidos durante un largo período de tiempo mientras la gente esté allí, con turbante o no, sin importar el color de su piel, ninguno de nosotros de ningún modo debería degradar a los demás por nuestras apariencias. No es justo y no está bien”.