Continúan las protestas contra la cadena de comida rápida Chik-fil-A luego de que su fundador declarara abiertamente su oposición a las personas homosexuales, bisexuales y transexuales (comunidad que es conocida por la sigla en inglés LGBT). En las últimas semanas, el presidente de Chik-fil-A, Dan Cathy, reconoció financiar grupos anti-LGBT y se manifestó en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo. El viernes, activistas y defensores de los derechos de los homosexuales, transexuales y bisexuales organizaron una movilización “besada” nacional frente a los locales de Chick-Fil-A.
Un manifestante dijo: “Está promoviendo el odio. Está promoviendo que la gente siga ocultando su realidad y no viva la vida para la que nació. Promueve el suicidio, la intimidación, todo lo malo. Me parece bien que alguien ejerza el derecho consagrado en la Primera Enmienda, pero no si es odio contra otras personas”.