Las fuerzas del gobierno sirio están luchando contra los rebeldes que se oponen al Presidente Bashar al-Assad cerca de un aeropuerto en la provincia de Idlib, al norte del país. La violencia tiene lugar un día después de que grupos de la oposición afirmaron que 75 personas murieron en todo el país. El martes, ataques aéreos del gobierno impactaron en áreas rebeldes en Aleppo mientras los enfrentamientos provocaron el cierre del aeropuerto de la ciudad. También se informó que hubo fuertes enfrentamientos cerca de Damasco. El domingo, el enviado de paz de la ONU y la Liga Árabe, Lakhdar Brahimi, advirtió que la crisis de Siria se está profundizando.
Lakhdar Brahimi afirmó: “La situación en Siria es muy, muy grave y las diferencias aumentan cada vez más. Debe haber una solución política que conforme al pueblo sirio y le regrese a la gente sus derechos constitucionales, de lo contrario Siria se convertirá en un infierno”.