Sudáfrica desplegó hasta 400 soldados en la República Centroafricana en un intento de ayudar al gobierno a derrotar el avance de los rebeldes. Los rebeldes seleka reivindicaron una serie de victorias en las últimas semanas, luego de acusar al gobierno de violar un acuerdo de paz de 2007. Otras varias naciones africanas, incluido el país limítrofe Chad, han enviado tropas para ayudar en el combate contra los rebeldes. En Bangui, capital de la República Centroafricana, Ellen Van Dervelden, de Médicos Sin Fronteras, dijo que los disturbios en dicha república son señal de una “crisis silenciosa”.
Van Dervelden afirmó: “Hasta ahora, la crisis en la República Centroafricana es silenciosa debido a los indicadores de salud tan pobres que ya existían a través de indicadores de crisis transitorias, en tanto que al mismo tiempo la atención a esta crisis era muy limitada, incluso antes de que se desencadenara la actual crisis. Ya había muy poco desarrollo de las ONG o de las acciones de ayuda o las empresas. En este país, incluso en sus mejores momentos, gran cantidad de gente se hubiera beneficiado con mucha ayuda, y esta situación no ha hecho más que complicarse”.
La República Centroafricana se encuentra entre los países más pobres del mundo, a pesar de contar con depósitos de oro, diamantes y uranio, que son extraídos por intereses extranjeros.