El Departamento de Agricultura afirma que tres plantas de procesamiento de pollos en California de la empresa Foster Farms podrán permanecer abiertas, tras haber sido vinculadas con un brote de salmonella por el que alrededor de 300 personas se enfermaron en diecisiete estados. El organismo había amenazado anteriormente con cerrar las plantas, al sostener que las condiciones allí “podían plantear una amenaza grave a la salud pública”. El pánico a raíz de la salmonella coincidió con la situación precaria de los organismos federales de salud debido a la paralización del gobierno. En el Centro de Control y Prevención de Enfermedades, que hace un seguimiento de brotes que afectan a varios estados, alrededor de un 68% de los trabajadores han sido suspendidos de sus puestos. Treinta fueron reintegrados para responder al brote. En la Administración de Fármacos y Alimentos de Estados Unidos, que se encarga de realizar inspecciones de los alimentos, alrededor de un 45% del personal ha sido suspendido. La línea de emergencia de la USDA para cuestiones de seguridad relacionadas con la carne y el pollo no está funcionando.
Cientos de enfermos por brote de salmonella, mientras trabajadores de salud fueron suspendidos de sus puestos
Titular11 Oct. 2013