La gigante de fondos de alto riesgo SAC Capital aceptó declararse culpable del fraude de títulos valores y pagar una multa récord de 1.200 millones de dólares. Bajo el acuerdo, SAC admite un plan de tráfico de información privilegiada, por el cual obtuvo ganancias por cientos de millones de dólares para la empresa y su multimillonario dueño, Steven Cohen, durante más de diez años. Preet Bharara, el fiscal de Estados Unidos para el distrito sur de Nueva York, reveló el acuerdo.
Bharara dijo: “Todas las compañías SAC acusadas acordaron declararse culpables. Todas aceptaron cerrar sus negocios externos de inversión y pagar colectivamente multas y penalizaciones por la cantidad récord de 1.800 millones de dólares. Los acuerdos de hoy, si son aprobados, resolverán los dos casos del gobierno contra SAC iniciados en julio, tanto la acusación delictiva contra las compañías SAC como el proceso civil por confiscación y lavado de dinero”.
El caso marca la primera vez que una compañía importante de Wall Street admite hechos delictivos en casi 30 años. Aunque SAC ya no manejará inversiones externas, seguirá funcionando con la fortuna de su dueño, Steven Cohen, estimada en unos nueve mil millones de dólares.