Un juez británico ordenó la publicación de un audio de una cámara colocada en un casco, que captó la ejecución de un hombre afgano por parte de soldados británicos en 2011. Los soldados están siendo juzgados en un consejo de guerra por el homicidio del individuo. En la grabación, un soldado rechaza el ofrecimiento de otro de disparar al hombre en la cabeza como demasiado “obvio”. A continuación, le dispara al hombre en el pecho. Después, el soldado le dice a sus compañeros “obviamente esto queda entre nosotros…acabo de violar el Convenio de Ginebra”.
Soldado A: “No es nada que no nos harías a nosotros”.
Soldado B: “Lo sé”.
Soldado A: “Obviamente, esto queda entre nosotros, compañeros”.
Soldado B: “Sí, entendido, compañero”.
Soldado A: “Acabo de violar el Convenio de Ginebra”
Soldado B: “Sí, entendido”.
El soldado que disparó al hombre afgano afirmó que creía que el hombre ya estaba muerto.