La Reserva Federal anunció planes de reducir progresivamente su programa mensual de estímulo económico. En virtud de la política denominada “flexibilización cuantitativa”, la Reserva Federal ha gastado 85.000 millones de dólares al mes en la compra de bonos hipotecarios y del Tesoro, en un intento de promover el crecimiento económico. El miércoles, el presidente de la Reserva Federal, Ben Bernanke, sostuvo que las mejoras económicas provocarán una reducción del programa de 10.000 millones de dólares al mes.
Bernanke dijo: “A pesar de algunas dificultades fiscales, la economía ha estado creciendo a un ritmo moderado y prevemos que el crecimiento remontará en los próximos trimestres, con la ayuda de una política monetaria flexible y la disminución de la presión fiscal. El mercado laboral continúa mejorando: el índice de desempleo continúa disminuyendo. Por otra parte, la recuperación claramente no ha terminado, ya que el desempleo sigue siendo elevado y tanto el subempleo como el empleo a largo plazo continúan siendo grandes preocupaciones”.
Bernanke cesará en sus funciones como director de la Reserva Federal el mes próximo y ocupará su lugar Janet Yellen. Durante la que probablemente haya sido su última conferencia de prensa como director de la Reserva Federal, se le preguntó a Bernanke qué habría hecho de otra manera.
Ben Bernanke respondió: “Fuimos lentos a la hora de reconocer la crisis, fui lento para reconocer la crisis. En retrospectiva, se trató de una crisis tradicional y clásica pero de apariencia muy, muy diferente. Distintos tipos de instrumentos financieros, distintos tipos de instituciones hicieron que para un historiador como yo fuera más difícil de reconocer. Si hubiéramos o no podido prevenirla o haber hecho más de lo que hicimos es otro tema”.