Estados Unidos evacuó a cientos de personas del combate en Sudán del Sur, en medio de temores de que el país se encuentra al borde de una guerra civil. En una carta a líderes del Congreso, el Presidente Obama advirtió que “es posible que adopte medidas en el futuro para fortalecer la seguridad de los ciudadanos, el personal y los bienes estadounidenses”. Obama afirmó que 46 soldados estadounidenses participaron en la evacuación, además de los 45 que ya habían sido enviados para proteger la embajada de Estados Unidos en Juba. Cuatro soldados estadounidenses resultaron heridos el sábado cuando una aeronave se prendió fuego. Mientras tanto, la misión de las Naciones Unidas ha trasladado a su personal no esencial desde la zona de conflicto en la localidad de Bor. El coordinador de ayuda humanitaria de la ONU Toby Lanzer describió la situación en el lugar.
Lanzer dijo: “Acabo de regresar de Bor en Jonglei. La situación allí está muy tensa. Pasamos la mayor parte del día evacuando a heridos, evacuando a ciudadanos de diferentes países. Cuando salí de la base y me dirigí al aeropuerto de Bor, vi que había muchos saqueos y tiroteos. Había muchos cadáveres y la juventud está totalmente descontrolada, tienen muchas armas. Es preciso controlar la situación”.
La violencia surgió este mes cuando el Presidente Salva Kiir acusó a su ex Vicepresidente de intentar dar un golpe de Estado. Los rebeldes aliados al ex Vicepresidente ahora tomaron el control de áreas importantes, como las capitales de dos estados.