En México, activistas por la paz apelan a los Estados Unidos para que contengan el flujo de armas de asalto que alimentan su sangrienta guerra del narcotráfico. Se estima que el 90% de las armas de fuego utilizadas por pandillas narcotraficantes mexicanas vienen de Estados Unidos. El pasado lunes, los manifestantes lanzaron un dirigible motorizado con la leyenda “Adiós a las armas” mientras entregaban una petición con más de 18.000 firmas a la embajada de Estados Unidos solicitando mayor restricción en ventas de armamento. Entre ellos se encontraba el poeta mexicano Javier Sicilia, cuyo hijo fue asesinado por narcotraficantes.
Sicilia dijo: “Si no se trabaja esto en la agenda bilateral, si no está común a las prioridades junto con el asunto de la regulación de las drogas y de una política verdaderamente seria del lavado de dinero, no va a ser posible detener el horror que está viviendo México”.
El presidente Barak Obama estará visitando México el jueves y Costa Rica el viernes.