El gobernador de Texas, Rick Perry, lanzó un ataque personal contra la senadora Wendy Davis pocos días después de que su estrategia obstruccionista de casi once horas frustrara un intento de los republicanos de clausurar la mayoría de las clínicas de abortos del estado. Hablando ante el mayor grupo en contra del aborto del país, el Comité Nacional por el Derecho a la Vida, Perry hizo alusión a la propia experiencia de Davis como madre adolescente e hija de madre soltera.
El gobernador de Texas afirmó: “El hecho es: ¿quiénes somos para decir que los niños nacidos en las peores circunstancias no puedan tener una vida exitosa? Hasta la mujer que el otro día en el Senado puso en práctica una maniobra obstruccionista nació en circunstancias difíciles; es hija de una madre soltera y fue madre adolescente ella misma. Pudo graduarse de la Facultad de Derecho de Harvard y ser senadora de Texas. Es una lástima que no haya aprendido de su propio ejemplo que cada vida merece una oportunidad para realizar todo su potencial y que cada vida importa”.
En una declaración, Davis dijo que los comentarios de Perry carecían de la dignidad y el lustre del alto cargo que ocupa, y que eran palabras de poca monta que reflejan un punto de vista oscuro y negativo. Perry convocó a otra sesión legislativa especial para reflotar el proyecto de ley que Davis y sus partidarios derrotaron la semana pasada.