La Agencia de Seguridad Nacional (NSA, por su sigla en inglés) afirma que está poniendo en práctica nuevas medidas de seguridad tras las filtraciones de Edward Snowden que revelaron su amplio programa de espionaje. El director de la NSA Keith Alexander afirmó que la agencia ha desarrollado una “regla de dos hombres” que requiere que dos administradores del sistema trabajen en forma simultánea para tener acceso a información importante. En declaraciones realizadas durante el Foro de Seguridad de Aspen en Colorado, Alexander también habló del desarrollo de armas cibernéticas por parte del gobierno de Barack Obama, al afirmar que alrededor de 4.000 personas de unidades del Pentágono fueron asignadas a realizar ataques y defensa cibernéticos. Alexander también dio a entender por primera vez que el Presidente Obama había planteado cuestionamientos acerca del número de “errores” que podían suscitarse de lo que el director de la NSA denominó recopilación accidental de datos de ciudadanos estadounidenses. Cuando se le preguntó acerca del efecto de las filtraciones que reveló la vigilancia de las comunicaciones realizada por la NSA —tanto a nivel nacional como en el extranjero—, Alexander las condenó duramente.
Keith Alexander dijo: “Creo que esto ha provocado un daño considerable e irreversible a nuestro país. Y, seamos claros, la finalidad de estos programas y el motivo por el cual son secretos no es para ocultarlos de la población estadounidense, no es para ocultarlo de ustedes, sino para ocultarlo de personas que están entre nosotros y pretenden matarlos”.
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