En Ucrania, un grupo de hombres armados tomó el control de los dos aeropuertos en la región de Crimea, a medida que la tensión aumenta. El nuevo gobierno de Ucrania, que tomó el poder el pasado fin de semana, calificó la medida de “invasión y ocupación por parte de las fuerzas rusas”. La flota rusa del Mar Negro, que tiene su base en la región, negó que sus fuerzas hubieran participado en la incautación de los aeropuertos. Crimea es la única región de Ucrania que tiene una mayoría étnica rusa. Era territorio ruso hasta ser transferido a Ucrania en 1954, durante la era soviética. Se han llevado a cabo protestas en esta región que condenan el derrocamiento del Presidente democráticamente electo de Ucrania, Viktor Yanukovich.
Genadiy Vlasof, miembro del Grupo del Bloque de Rusia, afirmó: “Algunas de las nuevas autoridades en Kiev incluyen a ciertas personas que llevaban máscaras gritando ‘¡Moscovitas al cuchillo!’ en la plaza, alimentando la ira nacional. Son enemigos de todos los que hablan ruso en territorio ucraniano, y son capaces de usar la fuerza para matar a las personas que viven en el sudsudeste de Ucrania”.
Yanukovich ahora se encuentra en Rusia y se espera que dé una conferencia de prensa el día de hoy. Mientras tanto, Estados Unidos está rechazando las afirmaciones de que el cambio de autoridades en Ucrania constituye un golpe de Estado. El jueves, el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo que Yanukovich había “abdicado de sus responsabilidades” y “socavado su legitimidad” huyendo Kiev. Carney describió los planes para trabajar con el nuevo gobierno.
Jay Carney dijo: “En lo que respecta a la asistencia de Estados Unidos, seguimos considerando una serie de opciones, entre ellas garantías de préstamos para apoyar económicamente a Ucrania. El siguiente paso es que el nuevo gobierno reanude el diálogo con el FMI y se involucre, mientras nosotros comenzamos a tomar medidas en coordinación con los asociados multilaterales y bilaterales, así como con el nuevo gobierno”.