Defensores de una reforma sobre las drogas piden al Presidente Obama que haga uso de la autoridad que su cargo le confiere para reclasificar a la marihuana según su propia opinión, la cual expresó recientemente. En una entrevista para la revista New Yorker del mes pasado, Obama expresó que no cree que la marihuana sea más peligrosa que el alcohol e hizo un llamado a tratar el problema como un asunto de salud pública. El viernes, Jake Tapper de CNN preguntó a Obama si ello llevaría a un cambio en las políticas.
Tapper preguntó: “Usted dijo que piensa que fumar marihuana es un mal hábito, pero que no cree que resulte peor para las personas que beber. Ahora bien, eso contradice la política oficial del gobierno de Obama, tanto por el sitio web de la Oficina de la Política Nacional para el Control de Drogas, como por el hecho de que la marihuana sea considerada narcótico de Clasificación I, junto con la heroína y el éxtasis. ¿Cree que habló de manera demasiado informal con [David] Remnick en The New Yorker, o está evaluando dejar de considerar a la marihuana como narcótico de Clasificación I?”.
Obama respondió: “Primero que nada, lo que se considera o no narcótico de Clasificación I es tarea del Congreso”.
Tapper agregó: “Creo que es la DEA la que decide eso”.
Obama continuó: “No es algo que podamos empezar a cambiar por cuenta propia. No, existen leyes que apoyan esas resoluciones”.
A pesar de que Obama afirme que la clasificación de la marihuana depende del Congreso, tanto la Administración de Control de Drogas (DEA, por su sigla en inglés), como el Fiscal General tienen la potestad de reclasificarla. En un comunicado, el grupo en defensa de la marihuana con fines médicos Americans for Safe Access expresó: “El Presidente Obama dijo a la población durante su discurso del Estado de la Unión que desde el ejecutivo se tomarían las medidas que estuvieran a su alcance para ayudar al pueblo estadounidense. El Presidente tiene la facultad de reclasificar la marihuana y podría ejercer dicha facultad en todo momento”.
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