Un nuevo informe expresa que las autoridades iraquíes están deteniendo ilegalmente a miles de mujeres iraquíes y sometiendo a muchas de ellas a tortura, violación y amenazas de abuso sexual. Human Rights Watch afirma que las mujeres informaron haber sufrido patadas, ser colgadas cabeza abajo, golpes en los pies, descargas eléctricas y agresiones sexuales durante los interrogatorios de las fuerzas de seguridad. Sarah Leah Whitson, de Human Rights Watch, describió las conclusiones.
Sarah Leah Whitson declaró: “Hemos hallado docenas de casos de mujeres que dijeron haber firmado confesiones como resultado de la tortura. Nosotros mismos hemos documentado la tortura en sus cuerpos, ya que dejó marcas. Hemos hablado con jueces que han confirmado haber sido presionados para arrestar a mujeres sin evidencia. En Irak aún permanece un sentido de impunidad absoluta de los servicios de seguridad, lo cual es agradecido y autorizado por el gobierno. Hasta que Maliki deje en claro que no tolerará torturas ni abusos, ni en prisiones ni en estaciones de policía de Irak, es previsible que esto continúe”.