Miles de personas marcharon hacia la capital del estado de Florida el lunes en una manifestación contra la ley de “legítima defensa” de ese estado. Entre los participantes se encontraba el reverendo Al Sharpton y los padres de Travyon Martin y Jordan Davis, dos jóvenes afroestadounidenses desarmados que fueron asesinados en Florida en los últimos dos años. La madre de Trayvon, Sybrina Fulton, expresó que Florida le está fallando a las personas de color, mientras que por su parte, la madre de Jordan, Lucia McBath, dijo que el movimiento se negará a dar marcha atrás.
Sybrina Fulton expresó: “Florida es un estado de ‘f’. La ‘f’ para Florida porque en este momento, Florida nos está fallando”.
Lucia McBath sostuvo: “Continuaremos luchando. Continuaremos de pie. No nos vamos a retirar”.
Los opositores pretenden la derogación de la ley; sin embargo, republicanos de Florida impulsan una medida por la que se extendería su alcance. Un nuevo proyecto de ley aprobado la semana pasada convertiría en legal el efectuar un disparo de advertencia contra un potencial atacante. La propuesta, que cuenta con apoyo de la Asociación Nacional del Rifle, beneficiaría claramente a acusados como Marissa Alexander, una mujer afroestadounidense condenada a veitne años de prisión por efectuar un disparo de advertencia cerca de su esposo, de quien se había separado. Alexander se enfrenta a 60 años de prisión al llevarse a cabo nuevamente su juicio. Sin embargo, quienes se oponen al proyecto de ley temen que la extensión del margen de acción pueda llevar a que se realicen todavía más disparos contra personas de color desarmadas.
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