Georgia ha programado la ejecución de un prisionero condenado a muerte para esta noche, usando una única dosis de pentobarbital de una fuente secreta. El lunes, un juez federal rechazó el argumento de Marcus Wellons de que el secreto vulnera sus derechos y podría ocasionar sufrimientos innecesarios. A menos que un tribunal emita un indulto, Wellons será el primer preso ejecutado en Estados Unidos desde la ejecución fallida en Oklahoma de Clayton Lockett, quien se convulsionó, gimió y estuvo 43 minutos para morir. Los resultados iniciales de una autopsia independiente publicados la pasada semana hallaron que el equipo de ejecución no pudo colocar correctamente la vía intravenosa de Lockett. Están previstas otras dos ejecuciones para el miércoles en Florida y Missouri, dos estados que también ocultan las fuentes de sus fármacos letales.
Tres estados programan ejecuciones de prisioneros, manteniendo en secreto información en torno a los fármacos
Titular17 Jun. 2014