Muchos relacionan la represión del disenso impulsada por el régimen egipcio con el anuncio realizado este mes por el comediante egipcio más conocido, acerca de que dejaría de emitir su programa. La emisión de Bassem Youssef había sido comparada con el programa The Daily Show de Jon Stewart en EE.UU., por sus opiniones cómicas sobre la política en Egipto y Medio Oriente. El programa era muy conocido; llegó a tener más de treinta millones de televidente por episodio. Youssef dijo que ponía fin a su programa antes de tener que enfrenar la censura y amenazas de muerte. Youssef fue impreciso en relación a la presión que enfrentaba, pero sugirió que el régimen militar le ha hecho imposible continuar. Al hablar en el foro de medios globales de Deutsche Welle, Youssef dijo que su decisión de suspender el programa podría considerarse como un nuevo comienzo. “Hemos inspirado a toda una generación a salir y expresarse a su manera”, afirmó Youssef. “La sátira y la comedia podrían ser uno de los antídotos contra el miedo. Libera la mente. Libera el juicio. Por eso es una amenaza”.
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