Grandes zonas de Gaza permanecen sin electricidad ni agua corriente, después de que Israel atacara la única central eléctrica de la zona a principios de esta semana. El Secretario General Adjunto de la ONU, Jan Eliasson, clamó por el cese de los bombardeos.
Eliasson declaró: “¿Cómo puede funcionar un hospital sin agua potable? ¿Cómo se puede almacenar comida si no se pueden usar los refrigeradores? Todo lo que damos por sentado se ha ido. Así que tenemos una situación inusualmente peligrosa desde el punto de vista humanitario, y no creo que necesitemos más recordatorios de la importancia de detener este horror. Tenemos que llegar al fin de los combates”.
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