El Presidente Obama promulgó una ley que autoriza más de 560 millones de dólares en gastos en proyectos de inteligencia estadounidense para los próximos cinco años. Esta cifra no incluye el amplio despliegue de programas de espionaje estadounidenses que se mantienen en secreto. La ley extiende además la protección a denunciantes para aquellos empleados que denuncien preocupaciones a través de canales autorizados, pero no extiende los amparos para contratistas de agencias de inteligencia, como Edward Snowden, quien expresó que no existían canales adecuados para poder plantear sus preocupaciones acerca del espionaje desarrollado por la NSA.
Obama promulga nuevo proyecto de ley de inteligencia
Titular08 Jul. 2014