El gobierno libio advierte de la posibilidad de una guerra civil a gran escala a menos que se logre controlar a las milicias fuertemente armadas. Libia se ha visto agitada por combates entre milicias rivales tras el derrocamiento, respaldado por Estados Unidos, de Muammar Gaddafi en 2011. El domingo, las milicias islamitas reivindicaron el control de la capital, Trípoli, luego de haber tomado el principal aeropuerto. El miércoles, el embajador libio Ibrahim Dabbashi dijo en el Consejo de Seguridad de la ONU que su país corre el riesgo de llegar a una “franca guerra civil si no somos muy cuidadosos”. Advirtiendo de la posibilidad de un “creciente peligro”, el enviado saliente de la ONU a Libia, Tarek Mitri, afirmó que más de cien mil personas han sido desplazadas desde que el conflicto se agravara el mes pasado.
Tarek Mitri declaró: “La amenaza de la proliferación de grupos terroristas se ha vuelto real. Todos sabemos de su presencia y actividades en una serie de ciudades libias. Por el momento, la situación caótica de seguridad y la muy limitada capacidad del gobierno para contrarrestar la amenaza pueden haber generado un terreno fértil para un creciente peligro en Libia y más allá”.