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El papa Francisco llegó a Nueva York, donde hablará ante la Asamblea General de la ONU. El jueves se convirtió en el primer Papa que habla ante una sesión conjunta del Congreso de EE.UU. En dicha ocasión, hizo un llamado a los países para que adopten la Regla de Oro cuando se trata de refugiados y usó la oportunidad para hacer un llamado a poner fin al comercio internacional de armas. “¿Por qué se venden armas letales a quienes planean causar sufrimientos indescriptibles a personas y sociedades?”, preguntó el papa Francisco. “Lamentablemente, la respuesta, como todos sabemos, sencillamente es por dinero; dinero manchado en sangre, con frecuencia con sangre inocente. Frente a este silencio vergonzoso y culpable, es nuestro deber enfrentar el problema y detener el comercio de armas”. Después del discurso antes el congreso, el papa Francisco, rechazó una invitación a cenar con los legisladores y fue a comer con personas sin techo en Washington D.C. “No podemos encontrar ninguna justificación social ni moral a la falta de vivienda”, dijo el papa Francisco. Hablamos con la hermana Simone Campbell, directora ejecutiva de NETWORK y líder del proyecto Nuns on the Bus.
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