El planeta ha cruzado un nuevo umbral: los niveles promedio de dióxido de carbono en la atmósfera a lo largo de 2015 fueron de 400 partes por millón (ppm), según la Organización Meteorológica Mundial. La comunidad científica ha aconsejado por largo tiempo que los niveles de dióxido de carbono en la atmósfera se mantengan por debajo de 400 ppm –o incluso por debajo de 350 ppm– para evitar un cambio climático catastrófico. Los científicos predicen que los niveles de dióxido de carbono no bajarán del promedio de 400 ppm en las próximas décadas, incluso si se toman medidas agresivas para reducir las emisiones mundiales de carbono. También está previsto que 2016 sea el año más caluroso del que se tengan registros.
Temas: