En noticias de la campaña electoral, los candidatos presidenciales demócratas Bernie Sanders y Hillary Clinton están haciendo campaña para las primarias del 7 de junio en California, donde las encuestas los posicionan en un empate. Clinton estaba en su ciudad natal de Chappaqua, Nueva York, este fin de semana, pero canceló algunos puntos de su campaña en Nueva Jersey para agregar otros en California. El viernes, habló en una pequeña reunión comunitaria en Oakland.
Hillary Clinton enunció: “Creo que una de las mejores maneras en que puedo ser una buena compañera es destacando lo que está funcionando, reconocer a las personas que intentan trabajar juntas y utilizar la Casa Blanca. Me gusta decir que sí, que podemos utilizar la Casa Blanca como un ‘púlpito acosador’. No queremos acosadores en la Casa Blanca, pero podemos usar el púlpito para hablar de los problemas”.
En las últimas semanas, Bernie Sanders ha centrado la energía de su campaña en las primarias de California. Estas fueron algunas de sus palabras el viernes, en un acto político en San Pedro.
Bernie Sanders declaró: “Nuestras ideas y creencias [se basan] en la justicia económica y la justicia social, en la justicia racial y la justicia ambiental, en la reforma migratoria y un camino hacia la ciudadanía, en la reconstrucción de las zonas urbanas deprimidas en todo el país, en la protección de las necesidades de los pueblos originarios; nuestras ideas son el futuro de este país”.
El domingo, Sanders visitó la sede original de Delano del sindicato United Farm Workers, donde reiteró su llamado a una prohibición nacional de la fractura hidráulica, o fracking, cuando se le preguntó lo que haría con respecto a la mala calidad del agua en el valle de San Joaquín. Esto se produjo al tiempo que grupos ecologistas critican al gobierno de Barack Obama después de que dos agencias federales finalizaran informes que afirman que el fracking en cercanías de la costa de California no supondría ningún riesgo “importante” para el medioambiente. El anuncio de los informes de la Oficina de Gestión de Energía Oceánica y de la Oficina de Control de Seguridad y Medio Ambiente de Estados Unidos pone fin a una suspensión judicial del fracking en alta mar, que se había puesto en marcha a principios de este año, después de que el Centro para la Diversidad Biológica demandara la práctica del gobierno de “aprobar de manera automática” la perforación en alta mar sin un análisis ambiental.
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