A seis trabajadores de la central nuclear Hanford Site de Hanford, en el estado de Washington, se les están practicando estudios médicos, ya que es posible que hayan estado expuestos a vapores químicos resultantes de desechos radiactivos del programa de armamento nuclear estadounidense, que se almacenan en tanques subterráneos. El número total de trabajadores que están siendo examinados por la posible exposición a esos gases asciende ya a más de 30. El mes pasado se reveló que miles de litros de desechos radiactivos se habían filtrado entre dos muros de uno de los tanques, en un incidente al que un extrabajador del lugar calificó de “catastrófico”.
Temas: