El Supremo Tribunal de Brasil determinó el alejamiento del cargo del legislador que impulsó la iniciativa de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff. El presidente de la Cámara de Representantes, Eduardo Cunha, presentó los cargos contra Rousseff, a pesar de enfrentar un juicio por corrupción. Sin embargo, parece poco probable que su suspensión detenga el proceso de juicio político contra la presidenta. Brasil se ha visto sumergido en un gran escándalo de corrupción, pero Rousseff no ha sido acusada de ninguna irregularidad financiera. Esta semana, al vicepresidente Michel Temer, que reemplazaría a Rousseff, se le ordenó pagar una multa por violar los límites financieros impuestos a la campaña electoral.
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