En Tulsa, Oklahoma, cientos de personas se congregaron en la Iglesia Bautista Antioquía el sábado para el funeral de Terence Crutcher, un hombre afroestadounidense de 40 años de edad que murió a causa de los disparos de un policía el 16 de septiembre. Crutcher fue recordado por su primo, Shea Seals.
Shea Seals expresó: “La muerte de Terence está siendo llorada por toda una ciudad. Él era así de especial. La ironía aquí es que Terence quería a todo el mundo. Tenía el increíble don de poner a otros por encima de sí mismo”.
El video de la policía muestra a Crutcher recibiendo un disparo mientras sus manos estaban en alto. Su familia afirma que el motor de su camioneta se detuvo cuando se dirigía a casa después de una clase de apreciación musical. El asesinato desató protestas en todo el país. La oficial Betty Shelby fue amonestada y puesta en libertad la semana pasada por cargos de homicidio involuntario por la muerte de Crutcher. De ser declarada culpable, Shelby enfrenta una condena de entre cuatro años y cadena perpetua.