Un tribunal del Reino Unido dictaminó que las ventas de armas del Reino Unido a Arabia Saudí fueron ilegales porque el Gobierno no consideró si se utilizarían para cometer “violaciones graves al derecho internacional humanitario”. El fallo del tribunal se emitió en un caso presentado por la Campaña contra el Comercio de Armas, que citó el uso de las armas del Reino Unido por parte de Arabia Saudí en su devastadora guerra en Yemen. Andrew Smith, portavoz de la Campaña contra el Comercio de Armas, celebró el fallo.
Andrew Smith manifestó: “Lo que deja claro este fallo es que durante mucho mucho tiempo el Gobierno del Reino Unido ha mirado para otro lado mientras decenas de miles de personas eran brutalmente asesinadas en la crisis humanitaria más devastadora del mundo”.
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