Activistas contra el cambio climático están intensificando los actos de desobediencia civil y la acción directa para llamar la atención sobre la aceleración de la crisis climática. En el Reino Unido, activistas de Fossil Free London y otras organizaciones interrumpieron este martes la reunión anual de accionistas de la empresa Shell. Los manifestantes irrumpieron en el lugar donde se desarrollaba la reunión y se enfrentaron a los inversionistas de la gigante petrolera, lo que provocó un gran tumulto.
Manifestante: “Felicítense por las ganancias récord que han obtenido, que provocan inundaciones, sequías y olas de calor sin precedentes. Bienvenidos a Shell, una compañía que está implicada en la destrucción de hogares, medios de subsistencia y vidas humanas. ¡Bienvenidos al infierno! Pero yo, señoras y señores, me niego a aceptar su infierno en la Tierra”.
Esta semana, la organización People’s Health Tribunal declaró culpables a las empresas Shell y TotalEnergies de cometer genocidio y ecocidio en comunidades de Sudáfrica, Nigeria, Mozambique y Uganda.
Mientras tanto, activistas de la organización ambientalista Just Stop Oil han estado liderando “marchas lentas” en las principales calles y puentes de Londres y han interrumpido el tráfico.
En Italia, activistas climáticos pertenecientes a la organización Last Generation protagonizaron un acto simbólico frente al edificio del Senado en Roma. Se cubrieron a sí mismos y el suelo con barro como forma de protesta, mientras el número de fallecidos por las devastadoras inundaciones récord ocurridas la semana pasada en el norte de Italia ascendió a 15.
En la ciudad suiza de Ginebra, un centenar de manifestantes que exigían la prohibición de los aviones privados se congregaron en el aeropuerto internacional de la ciudad y bloquearon la entrada a una exhibición de aeronaves. Según una activista de la organización Greenpeace, se ha registrado un reciente incremento del 64% en los vuelos de aviones privados en Europa.
Klara María Schenk: “La crisis generada por el cambio climático se agrava día tras día. Vemos condiciones climáticas extremas, incluso en Europa. Experimentamos sequías durante todo el invierno. Ahora están comenzando las tormentas de verano y de primavera. Y, al mismo tiempo, una élite súper rica y muy pequeña sigue contaminando como si no hubiera un mañana. Esto tiene que parar”.
En noticias relacionadas, Francia promulgó la prohibición de vuelos nacionales de corta distancia entre muchas ciudades importantes del país. La medida, destinada a controlar las emisiones de carbono, se aplicará a las rutas en las que existen alternativas ferroviarias.
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