Un tribunal de Kenia bloqueó un plan cuya finalidad era enviar 1.000 agentes de policía kenianos a Haití para ayudar a combatir la violencia de los grupos criminales y dictaminó que la medida era inconstitucional. El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó en 2023 la misión, que implicaba que en enero de 2024 se llevaría a cabo el despliegue de las fuerzas policiales kenianas en el país del Caribe. La reacción de los haitianos a la noticia fue variada, ya que algunos residentes habían solicitado una intervención extranjera debido a los crecientes actos de violencia que enfrenta el país, mientras que otros habían rechazado la llegada de actores extranjeros.
Psycka Lemaire: “La crisis es una crisis haitiana. Recuerdo cuando, entre 2005 y 2006, llegó la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití al país. Los soldados dejaron hijos abandonados y propagaron enfermedades como el cólera. Muchos niños y niñas quedaron huérfanos de padre. Hoy, si estamos unidos, podemos hacer cosas asombrosas”.