El ataque israelí contra el centro de reparto de ayuda humanitaria se produce al tiempo que gran parte de Gaza está al borde de la hambruna e Israel continúa limitando la cantidad de ayuda que permite ingresar al territorio asediado. Al menos 27 palestinos han muerto de inanición, entre los que se encuentran 23 niños y niñas. Mientras tanto, la cadena Al Jazeera informa que seis palestinos murieron en la ciudad de Gaza luego de que las fuerzas armadas israelíes abrieran fuego nuevamente contra una multitud que esperaba para recibir ayuda alimentaria. Más de 80 personas resultaron heridas en el incidente.
En otras noticias sobre Gaza, el medio Político informó que el Gobierno de Biden le ha comunicado en privado a Israel que Estados Unidos estaría dispuesto a apoyar un ataque israelí contra Rafah, siempre y cuando no se produzca una invasión a gran escala. Israel ha anunciado su intención de trasladar hacia otras partes de Gaza, hacia lo que denominó “islas humanitarias”, a la mayoría de los más de 1,4 millones de personas que se están refugiando en Rafah.
El miércoles, una familia en Rafah rompió el ayuno de la celebración musulmana del Ramadán en medio de los escombros de su casa destruida.
Um Mahmoud Abu Rizek: “El último Ramadán fue fantástico, pero este año no lo es. Muchas cosas que teníamos ya no están: mis hermanas, mi familia… Nuestra casa quedó destruida. Todavía hay personas bajo los escombros y aún no las han sacado. Esta casa era el sueño de los niños. Han perdido sus juguetes. Todo se ha perdido”.
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