En Senegal se ha llevado a cabo la investidura del presidente más joven de África. Bassirou Diomaye Faye, ganador de las elecciones democráticas celebradas recientemente, designó a Ousmane Sonko como primer ministro, coronando los impresionantes acontecimientos de las últimas tres semanas, en las cuales ambos pasaron de ser políticos opositores encarcelados a conformar el Gobierno de Senegal, con una plataforma que promete luchar contra la pobreza, la injusticia y la corrupción. Faye y Sonko fueron liberados de la prisión a mediados de marzo. El presidente anterior, Macky Sall, había intentado retrasar las elecciones, lo que generó rechazo en la sociedad por temor a estar entrando en un proceso electoral antidemocrático y, finalmente, dio lugar al triunfo de Faye con una plataforma panafricanista y transformadora. Al igual que gran parte de la población senegalesa, la ex primera ministra Aminata Touré celebra este resultado. Touré afirma que “prevaleció la democracia” a lo que el abogado y analista político senegalés Ibrahima Kane añade que la generación más joven del país tiene la tan esperada oportunidad de “sacudir el sistema”. Touré y Kane nos acompañan desde Dakar, la capital de Senegal.
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