Una cláusula añadida a último minuto al “gran y hermoso” proyecto de ley de presupuesto del presidente Trump apunta a prohibir que los planes de atención médica que reciben financiamiento de la Ley del Cuidado de Salud a Bajo Precio cubran abortos y, además, le quita el financiamiento a cientos de clínicas de la organización Planned Parenthood que brindan atención en salud reproductiva en todo Estados Unidos. “El Congreso nos está llevando literalmente a una crisis de nacimientos forzados”, dice Mini Timmaraju, presidenta de la organización de derechos reproductivos Reproductive Freedom for All, que está lanzando una campaña para incidir en senadores clave de cara a la votación en la Cámara Alta del proyecto de ley de presupuesto impulsado por el Partido Republicano.
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