Dos mujeres que viven al noroeste del Pacífico se declararon culpables de colocar en 2001 una bomba incendiaria que dañó un laboratorio de la Universidad de Washington, que trabajaba en la plantación de árboles genéticamente modificados. Lacey Phillabaum afrontará una pena máxima de cinco años de prisión. Jennifer Kolar afrontará una pena de hasta siete años. Si hubieran sido condenadas en un juicio, hubieran afrontado una pena mínima de treinta años de prisión. El gobierno redujo el tiempo de condena luego que las mujeres aceptaron cooperar con los fiscales y declarar contra otros activistas vinculados al Frente de Liberación de la Tierra.
Dos ex activistas del Frente de Liberación de la Tierra se declaran culpables
Titular10 Oct. 2006