En Canadá, el Nuevo Partido Democrático (NDP) obtuvo una histórica victoria en Alberta, provincia tradicionalmente conservadora. El electorado votó al NDP para una mayoría de gobierno que contará con 53 escaños, tras haber contado con solamente cuatro. La victoria derroca al Partido Conservador del primer ministro canadiense Stephen Harper después de haber estado más de cuatro décadas en el poder. Alberta es considerada desde hace años la provincia más derechista de Canadá. La gobernadora entrante, Rachel Notley, celebró su victoria.
Notley afirmó: “No sé. Creo que hemos hecho un poco de historia esta noche. Creo que el cambio ha llegado finalmente a Alberta”.
Notley ha prometido analizar el sector energético de Alberta y el pago de regalías efectuado por las empresas que extraen petróleo de alto contenido en carbono a partir de arenas alquitranadas. El NDP prometió además incrementar las tasas de impuestos al sector empresarial, aumentar el salario mínimo y trabajar cooperativamente con los pueblos originarios de la provincia. A nivel nacional, se espera que el NDP de Alberta presione al gobierno canadiense para que modifique su política ambiental y que abandone la presión ejercida por esa provincia en favor del oleoducto Keystone XL.