Miles de residentes de California y el oeste de Canadá se vieron obligados a evacuar sus hogares a medida que grandes incendios fuera de control destruían casas, cerraban carreteras, y obligaban a clausurar al lo menos un aeropuerto. Las autoridades de Columbia Británica declararon el estado de emergencia.
Chris Sonmor, residente de Columbia Británica, expresó: “Me desperté a eso de la 1:30 de la tarde, porque trabajo de noche, y vi un montón de mensajes de texto de mi esposa que decían que Ashcroft estaba rodeado, así que salí al patio y el fuego estaba en la ladera de la montaña, justo detrás de mi casa. Lo vimos bajar por la montaña”.