El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas impuso una nueva ronda de sanciones contra Corea del Norte como respuesta a los ensayos de dos misiles balísticos intercontinentales realizados por ese país el mes pasado. Las sanciones prohíben las exportaciones de carbón, hierro, plomo y mariscos desde Corea del Norte, lo que recortaría a un tercio los ingresos provenientes de exportaciones del país. Corea del Norte criticó las sanciones como “una violenta violación de nuestra soberanía”. El fin de semana, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, se reunió con el ministro de Relaciones Exteriores de China y con otros líderes asiáticos, en un encuentro para tratar el tema de la seguridad de la región celebrado en la capital de Filipinas, Manila. El ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, instó al diálogo para reducir las crecientes tensiones entre Estados Unidos y Corea del Norte.
Wang Yi: “Las sanciones son necesarias, pero las sanciones no son el fin último. Nuestro fin es que todas las partes relacionadas con cuestiones nucleares vuelvan a la mesa de negociaciones para hallar soluciones mediante el diálogo y lograr la desnuclearización de la península de Corea”.