El secretario de Defensa de Estados Unidos, Jim Mattis, llegará hoy a la localidad de McAllen, en el estado de Texas, para visitar a algunos de los miles de soldados que fueron enviados por el presidente Donald Trump el mes pasado. Casi 6.000 soldados en servicio activo se encuentran estacionados actualmente en los estados de Texas, California y Arizona, luego de los crecientes ataques que en los días previos a las elecciones de mitad de período Trump lanzó a las caravanas de migrantes centroamericanos que se dirigen a la frontera entre Estados Unidos y México. Trump advirtió que el número de soldados en la frontera podría llegar a 15.000, una cifra que excedería el número de soldados estadounidenses desplegados en Afganistán y casi triplicaría el número de tropas presentes en Irak. Según algunos informes, el despliegue de soldados en la frontera podría costar unos 220 millones de dólares, a pesar de que el Pentágono no considera que las caravanas de migrantes centroamericanos representen una amenaza para Estados Unidos. La visita de Mattis se produce luego del anuncio del gobierno de Trump sobre nuevas normativas inmigratorias bajo las cuales se le negará asilo a toda persona que ingrese al país por fuera de los pasos fronterizos establecidos.
Algunos cientos de migrantes de las caravanas de centroamericanos llegaron el martes a la ciudad fronteriza de Tijuana, mientras que la gran mayoría aún se encuentra a al menos 1.600 kilómetros de la frontera entre Estados Unidos y México. Visite democracynow.org/es para acceder a más información sobre la situación en la frontera.