El miércoles en la Cámara de Representantes de Estados Unidos, la líder de la minoría, la demócrata de California Nancy Pelosi, mantuvo una sesión sin precedentes de ocho horas de duración para convocar a los legisladores a proteger a los inmigrantes que llegaron a Estados Unidos cuando eran niños, los llamados “soñadores”.
Nancy Pelosi expresó: “No hay nada partidista ni político en proteger a los ‘soñadores’. Si aquí se propusiera una Ley DREAM, sería aprobada inmediatamente, con un fuerte apoyo bipartidista, y felicito a mis colegas republicanos por su valentía al hablar de esto. Sin embargo, nuestros ‘soñadores’ siguen en el limbo bajo una cruel nube de miedo e incertidumbre. La cobardía moral republicana debe terminar”.
El congresista de Illinois Luis Gutiérrez advirtió a Pelosi que sería una “completa traición” si ella apoyara cualquier acuerdo de gastos que no incluya una extensión del programa de Acción Diferida para Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés), que expirará en marzo.
El discurso de ocho horas de Pelosi se produjo después de que el jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Kelly, tratara a los jóvenes inmigrantes de “holgazanes” y declarara ante la prensa: “Hay 690.000 inscritos oficiales al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia, y el presidente envió una cantidad que equivale a dos veces y media esa cifra, a 1,8 millones. La diferencia entre [690.000] y 1,8 millones es de la gente que algunos dirán que tenían mucho miedo de inscribirse, mientras que otros dirían que eran demasiado perezosos para mover el trasero, pero [lo cierto es] que no se registraron [en el programa]”.
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